Paciente joven (28 años) que acude a la clínica dental con gran dolor en la zona superior izquierda. Tras valorar clínica y radiológicamente se comprueba que el dolor procede del segundo premolar superior izquierdo, al que hay que realizar un tratamiento endodóntico y posteriormente colocar un perno con reconstrucción seguido de una corona cerámica.
El perno que optamos poner es un perno de fibra de vidrio ya que el módulo de elasticidad es semejante al de la dentina y presenta menor riesgo de fractura, lo cementamos con un cemento de composite dual (polimeriza por luz y automáticamente) y reconstruimos el muñón con composite traslúcido para que deje pasar mejor la luz y permita un fraguado óptimo del material. Posteriormente colocaremos una corona en dicho premolar para evitar posibles fracturas del diente.
Debido a que el paciente tiene una amplia sonrisa, enseñando los corredores vestibulares al sonreir, le planteamos al paciente colocar una corona de cerámica sin metal porque es mucho más estética y se va a mimetizar mucho más en el entorno bucal, siendo prácticamente indetectable.
El paciente acepta el tratamiento propuesto consiguiendo un resultado realmente bonito con la total seguridad de que la cerámica utilizada (cerámica alemana Vita) aguantará perfectamente las fuerzas de masticación del paciente. Además con la toma de color con la guía 3D de ésta cerámica nos aseguramos un resultado predecible en cuanto al color se refiere.
