Sabías que… Curiosidades

  • Sabías que… existen bancos de dientes? Existen bancos de sangre y por qué no, también de dientes, en Noruega, los niños pueden donar sus dientes de leche a la ciencia, para así poder estudiar los contaminantes que pueden afectar a la salud de las madres y sus hijos. Este interesante proyecto, cuenta con la ayuda de más de 100 mil niños. Imaginamos que el Ratoncito Pérez debe hacer un regalo mayor por tan bonito gesto.
  • Sabías que… la odontología proviene del antiguo Egipto? El primer odontólogo reconocido se llamaba Hesy-Ra, conocemos su existencia ya que en su tumba (ubicada en el museo del Cairo) tiene un panel de madera y aparece escrito «jefe de dentistas y médico». Los medios que utilizaban eran sencillos, múltiples y variados, son sorprendentes para la sociedad actual. Solían utilizar medicina que solía ir acompañada de conjuros mágicos.
  • Sabías que… las muelas del juicio llegarán a desaparecer? Las muelas del juicio o tercer molar es un vestigio de la evolución, a nuestros antepasados de las cavernas les ayudaba a masticar carne cruda, raíces u otros alimentos duros, pero con el paso del tiempo nuestra dieta ha cambiado y nuestros alimentos son cocinados y más blandos. Según los expertos con el tiempo esas piezas desaparecerán a medida que los alimentos se vayan refinando y como consecuencia el maxilar será más pequeño.
  • Sabías que… en la ciudad de Kandy en Siri Lanka se conserva un diente del mismísimo Buda? Los budistas conservan este objeto divino en un lugar donde, curiosamente, se llama el templo del diente. Es un canino que se pasaba de rey en rey ya que poseerlo significaba tener el poder.
  • Sabías que… hay bebés que nacen con dientes? No es algo usual, de hecho, solo ocurre un caso de cada 3.000 nacimientos. A esos dientes se les llama natales y a los dientes que salen en el primer mes de vida se les llama neonatales. Suele ocurrir en más casos de niñas que de niños.
  • Sabías que… el esmalte es el mineral más duro del cuerpo humano? El esmalte es el tejido más duro del cuerpo, pero también hay que cuidarlo mucho y muy bien ya que no se regenera. El esmalte es translúcido e insesible al dolor, pues carece de terminaciones nerviosas.

Lara Leo.